ORGANIZARSE CONTRA LAS ARBITRARIEDADES Y LA DESORGANIZACIÓN

Este curso prefacultativo, como los anteriores o cualquiera que organiza la UMSA, no se destaca por su buena organización, ni mucho menos por un nivel de excelencia académica. Todo lo contrario, priman los abusos contra los estudiantes y la desorganización.

A menos de dos semanas del examen final, el 18 de diciembre, los postulantes a la Facultad de Sociales aún no tienen los textos oficiales a partir de los cuales se elaborarán las preguntas de esa prueba. Una de las tres materias se desarrolla a través de Internet, pero pocos son los que tienen suerte de hacer algunas consultas en la página, es decir, este instrumento informático, lejos de ayudar, se suma a todos los factores que dificultan la preparación de los estudiantes prefacultativos. Varios ayudantes no pueden cumplir con su función de ayudar porque no conocen la materia que dictan. Los estudiantes asisten a clases regularmente apenas para acumular 10% del total de la nota, el restante 90% tienen que conseguirlo en el examen final del 18 de diciembre, un examen uniforme para todos cuando el avance de las materias en aula fue desigual. Cada paralelo tuvo distintas temáticas y en grados distintos de avance. En ocasiones, algunos paralelos se quedaron sin aula y tuvieron que cambiar de ambientes constantemente. Bajo estas condiciones pocos van a ingresar a la Universidad.

Es importante señalar que esta situación, además de la responsabilidad de las autoridades correspondientes, se da por la intensa presión de la derecha universitaria quien incluso impuso la designación de algunos auxiliares derechistas, sobre todo de Trabajo Social. Incluso buscan propiciar la renuncia del Director del Prefacultativo, Marcos Salazar, expulsándolo de su cátedra universitaria de Trabajo Social por razones políticas. Esto implicará aún más crisis y desorganización.

EL CURSO PREFACULTATIVO NO FORMA NI EVALÚA, RESTRINGE EL INGRESO
Se ha demostrado, ya por varios años, que el curso prefacultativo no es un espacio en donde los postulantes se fortalecen académicamente y las autoridades universitarias tampoco brindan las condiciones para evaluar objetivamente el conocimiento. La forma actual de gobierno universitario y las autoridades que la sustentan son incapaces de realizar esta tarea; por eso el prefacultativo, como  otros casos en la UMSA, sirve  para recaudar dinero del bolsillo de los estudiantes.

Lo científico dentro de la universidad ya pasó a segundo plano, rige ahora el interés económico de dirigentes y autoridades de derecha que gobiernan la universidad. Que el curso prefacultativo sea tan desorganizado tiene su explicación de fondo en esta estructura universitaria que han construido los que tienen el poder dentro de la universidad. Hace pocos años, por ejemplo, la inscripción al Prefacultativo de Sociales costaba 50 bolivianos ahora subió a 200.

EL CAMBIO DE AUTORIDADES REDUJO EL PROBLEMA PERO NO LO SOLUCIONÓ
En la Facultad de Sociales hubo importantes luchas contra la corrupción (docentes truchos), por los derechos de los estudiantes (Cursos de Verano Gratuitos y de Calidad) y contra las arbitrariedades de las autoridades de derecha (como la declaratoria de “antiautonomistas”). Producto de estas luchas es que se logró sacar a la derecha del Decanato de la Facultad.

Esto tuvo su impacto en el prefacultativo. Antes todas las materias se las daba por Internet con igual deficiencia que ahora y con el objetivo de que ingresen muy pocos estudiantes, además de escandalosos casos de corrupción. Ahora, por lo menos es sólo una materia por Internet, pero las condiciones generales siguen siendo muy restrictivas.

Las nievas autoridades de la Facultad, que están en ese sitio gracias al apoyo estudiantil cansado de los abusos, mediocridad y corrupción de la derecha, deberían levantar las restricciones al ingreso y propiciar un curso prefacultativo que facilite el tránsito de la escuela a la Universidad. Pero, por lo que se ve hasta ahora, repiten los atropellos que realiza la derecha contra los estudiantes.
 
ORGANIZARSE PARA RECLAMAR MEJORES CONDICIONES DE INGRESO
Al igual que dentro de la Universidad, los prefacultativos no deben esperar dádivas de las autoridades, sólo podrán conseguir mejores oportunidades de ingreso mediante la organización y la movilización. Sólo organizados podrán garantizar su derecho a la educación. La elección de representantes por paralelo es un gran inicio para luego convocar a una asamblea de todos los postulantes.

Organizados pueden plantear:
1. Que se anule el examen único de 90% y que sean los docentes de cada materia quienes evalúen el 100%, en lugar del 10%, de acuerdo a lo avanzado en su aula. El 2007, por ejemplo, se logró esto. Además, todavía no se entregaron los textos oficiales para el examen del 18. Ya es tarde para eso, ya no queda tiempo.

2. Que la evaluación contemple actividades en el aula, trabajos prácticos y exámenes. No así un sólo examen por 90 puntos. La ponderación debe discutirse en las aulas (por ejemplo: aula 30%, trabajos 30% y examen 40%). Si hay estudiantes que optaron por no asistir a clases porque 10 puntos no valen la pena, debe brindárseles la oportunidad de recuperación con trabajos prácticos.

3. Que se promedien las notas de las tres materias. Existe el peligro de que por una sola materia, la de sociales, que se dicta por Internet, muchos estudiantes no logren el ingreso a la Facultad. Para que no ocurra esto se deben promediar las notas. Esta fórmula ayuda a aprobar el curso porque, aunque el estudiante se aplace en una materia, la posibilidad de ingreso se mantiene, ya que la nota final resulta de un promedio de la sumatoria de las tres materias. Es decir, se deben sumar las tres notas, luego dividirlas entre 3 y el resultado es la nota final. Si el promedio es superior a 51, entonces se aprueba. También se logró esto en gestiones anteriores.

4. También puede plantearse que se anule la materia de Sociales por el mediocre rendimiento del sistema “semipresencial”. Es triste que la materia más importante para la Facultad sea la más descuidada por las autoridades.

Esta pelea legítima por el ingreso a la Universidad se debe perfilar en la perspectiva del ingreso libre e irrestricto a la Universidad para toda la juventud.

La Paz, 5 de Diciembre de 2011