SALUD, TRABAJO, EDUCACIÓN SE GANARÁN CON LA MOVILIZACIÓN DE TRABAJADORES
COB: ROMPER LA TREGUA, VOTAR NULO Y CENTRALIZAR LAS LUCHAS RUMBO AL GOBIERNO OBRERO Y CAMPESINO
ELECCIONES QUE DESVÍAN LA LUCHA POR EL PODER DE LOS TRABAJADORES
Las elecciones se presentan como un desvío de las luchas de trabajadores que pusieron al gobierno de Áñez al borde del precipicio. La potenciación y centralización de las luchas se dieron en Julio y el órgano de combate reimpulsado por las bases fue la COB. Se unificó a obreros y campesinos en torno a las consignas de Salud, Trabajo y Educación. Sin embargo, la dirigencia reformista de la COB, Huarachi, siguiendo la política del MAS y a contramano de las resoluciones de asambleas, hizo campaña por la estrategia burguesa de elecciones. Junto a la burocracia traidora del Pacto de Unidad, también servil al MAS, rompieron la centralización de luchas obreras y campesinas convocando a movilizarse por el calendario electoral, sin conseguir nada más que la división entre trabajadores del campo y la ciudad y salvar a Áñez de caer por insurrección. El problema del poder de las bases de la COB estuvo planteado entre julio y agosto, pero su profundización fue claramente traicionada por la burocracia pro masista. Así le dieron un respiro a la burguesía para recomponer sus alternativas políticas junto a su aparato estatal maltrecho, viabilizando los comicios electorales.
MOVILIZACIONES SECTORIALES y OEP CUESTIONADA
Después de esta traición, las elecciones pasaron a primer plano, pero solo como un desvío de la movilización, no como un conjuro total de la lucha, pues esta continuó dándose por sectores que fueron consiguiendo reivindicaciones, como el caso de los gremiales y transportistas que obligaron al gobierno aprobar el diferimiento del pago de créditos afectando a los bancos; o la movilización de padres de familia en cada departamento que consiguió la entrega de canastas familiares. Las marchas en la sede de gobierno son el pan de cada día, sea por protesta del sector salud, mineros o fabriles.
Las elecciones del 18 de octubre, si bien se han impuesto, no tienen un camino llano y tranquilo. Además de estar atravesadas por la movilización sectorial, el cuestionamiento de fraude es directo contra el Órgano Electoral Plurinacional (OEP). La propia directiva de la COB ha llamado a vigilar las urnas contra un posible fraude. Plataformas pequeñoburguesas también llaman a lo mismo. Esta reacción es reflejo de la debilidad de las instituciones estatales que se resquebrajaron el año pasado con el triunfo de la movilización de masas contra Evo Morales.
La situación ha preocupado en demasía al gobierno de Áñez por ser de tensión similar a las previas electorales del 2019, que tenían movilizaciones sectoriales a su alrededor, fuertes cuestionamientos de fraude y terminaron con una insurrección en pleno conteo de votos. De ahí que el gobierno se prepara para afrontar un posible escenario de conflicto en los comicios electorales; en ese sentido ha comenzado con la intervención policial a la huelga de trabajadores de VITA y ha recibido la donación de armas nuevas del imperialismo con la careta de “lucha contra el narcotráfico”. Estas medidas giran en torno a imponer la trampa electoral.
SISTEMA ELECTORAL FRAUDULENTO
El sistema electoral es fraudulento y debemos repudiarlo. Se realiza con las mismas reglas del Fraude del MAS del 2019, socapando el engaño y bajo la draconiana Ley Electoral aprobada por el Gobierno de Bánzer que impide la legalización de opciones minoritarias de clase trabajadora. Actualmente solo se ha admitido candidatos de la oligarquía, por tanto, no hay representatividad de explotados y oprimidos. Los partidos que están en carrera electoral además reciben plata del Estado Burgués y están a su servicio; el voto ha sido convertido en una obligación en lugar de ser un derecho, entre otras barbaridades. Solo se impone una pseudodemocracia fraudulenta. Solo se presenta una pseudodemocracia fraudulenta.
CANDIDATOS DE LA OLIGARQUÍA
Arce-Choquehuanca, el MAS dispuesto a acribillar caravanas de trabajadores
La gran burguesía recuerda muy bien cómo en el gobierno del MAS sus ganancias se cuadruplicaron de $900 millones a 4 mil millones de dólares anuales. Cifras que el candidato Arce Catacora informó cuando era ministro de economía. Así también, Choquehuanca, gran defensor de la Pachamama en el discurso, pero en la práctica aplicó dentro del MAS las leyes de ampliación de la frontera agrícola a favor de la oligarquía agroindustrial, legalizando los incendios en la Amazonía, Chiquitanía y El Pantanal, que solo el 2019 mientras seguía en el gobierno arrasaron con más de 6 millones de hectáreas de los ecosistemas principales del país, una política ecocida que Áñez continúa aplicando al igual que lo hizo el MAS.
Esas son unas cuántas pruebas de que son candidatos de la oligarquía. Solo tienen una careta de “izquierda” para infiltrarse en el movimiento de masas. El MAS es tan servil a la clase dominante que en el 2019 fue capaz de matar por ella. Desplegó un brazo paramilitar pequeño burgués y lúmpen al que se le dio la orden de disparar a mineros, maestros y estudiantes que venían en buses desde Potosí y Sucre en protesta contra el gobierno de Evo, exigiendo además la recuperación del litio y los hidrocarburos de Incahuasi. El 8 de noviembre de aquel año los interceptaron en la carretera de Challapata y Vila Vila. Estuvieron a punto de masacrar a los obreros. Pero la movilización fue más fuerte y Evo fue derrocado. Sin embargo, la política de balear al proletariado con paramilitares denotó que el objetivo del MAS fue establecer un régimen igual o peor al bonapartismo. Su acción concreta llegó a ser colindante con el fascismo o semifascismo, pues se apoyó en hordas armadas pequeñoburguesas y lúmpenes que buscaron destruir físicamente la organización obrera y popular.
Con estos antecedentes, son toda una opción para la burguesía, pero todo un peligro para el proletariado, así que no merecen más que el rechazo de trabajadores del campo y la ciudad.
Mesa y Camacho
Las demás alternativas de la oligarquía se reducen a Mesa y Camacho, el primero más conciliador y el segundo más intransigente respecto al MAS. Todos con proyectos privatizadores y serviles a las transnacionales. Camacho, candidato con una campaña más regionalista en torno al empresariado de la media luna con centro en Santa Cruz, asesorado por publicistas que trabajaron en la campaña electoral del Kirchnerismo en Argentina, sin posibilidad de ganar le resta votos a Mesa colocando al MAS en primer lugar en las encuestas.
Algunos exdirigentes obreros y campesinos llaman a votar por Mesa en contra del MAS, pero es un craso error pues fortalecen otra opción de la oligarquía con un programa claramente pro imperialista. Mesa, por su servilismo a las transnacionales, ya fue derrocado una vez por la insurrección de masas del año 2005 en una revolución obrera y socialista que quedó inconclusa por culpa del Gobierno del MAS. Ahora, después de 15 años, se disputan la administración del Estado Burgués las mismas alternativas antiobreras. Ya se hizo la experiencia con el gobierno de cada uno, no merecen ningún apoyo del movimiento de masas.
VOTO NULO
Por lo expuesto, en rechazo al sistema electoral antidemocrático, fraudulento y a que solo se presentan candidatos de la oligarquía, considerando que se impuso un desvío electoral por la traición de las direcciones y que existen sanciones económicas para quienes no emitan su voto, el MST -JS llama a votar nulo, en pos de retomar el camino de la movilización de masas por sus reivindicaciones y el poder político del proletariado.
COB: ROMPER LA TREGUA, VOTAR NULO Y CENTRALIZAR LAS LUCHAS RUMBO AL GOBIERNO OBRERO Y CAMPESINO
Llamamos a los trabajadores a recuperar la COB para la lucha revolucionaria. ¡Abajo la tregua otorgada a Áñez! ¡Fuera la Burocracia Sindical traidora que está llamando a votar por Arce! La COB debe llamara a Votar nulo para que sea cual sea el gobierno que salga del proceso electoral fraudulento, enfrentemos los planes de ajuste que aplicarán contra explotados y oprimidos; para retomar la movilización conjunta por Salud, Trabajo y Educación. Basta de dispersión, que la COB cumpla con la tarea de centralizar las luchas rumbo a la huelga general por las propias reivindicaciones de clase trabajadora. La lucha debe ser por el gobierno obrero y campesino, que no es el gobierno de Arce y el MAS, sino el gobierno de la Central Obrera Boliviana como órgano de poder dual contrapuesto al poder estatal burgués.
Es una lucha por aplicar el programa revolucionario para resolver los problemas de fondo: nacionalizar sin indemnizar a la burguesía transnacional. Expropiar los latifundios. Estatizar la banca, Establecer el derecho a la autodeterminación de los pueblos originarios. Establecer el monopolio del comercio exterior, entre otras. Todo este programa en el camino de construir una Bolivia verdaderamente socialista. Para ese objetivo es necesaria una dirección, un partido que defienda y organice a lo mejor del movimiento obrero y de la juventud revolucionaria. Es la tarea en la que, desde el MST, estamos empeñados e invitamos a la juventud y a los trabajadores a sumarse.
Octubre de 2020
