Bolivia: situación nacional tras dos victorias de masas contra el MAS – octubre 2021

Juan Jose


ADEPCOCA MARCÓ EL CAMINO DEL ASCENSO Y LA LUCHA POR RECUPERAR LA INDEPENDENCIA DE CLASE EN TODOS LOS SINDICATOS

¡LIBERTAD DE LOS PRESOS POLÍTICOS DE ADEPCOCA!

GREMIALES, TRANSPORTISTAS Y MINEROS DE COOPERATIVAS DERROTAN LEY ANTIPOPULAR DEL MAS

¡CONGRESO DE LA COB! ¡YA! POR PLAN DE LUCHA UNITARIA Y NUEVA DIRECCIÓN CLASISTA Y DE COMBATE

El país entró en una nueva situación favorable a la lucha de masas, al ascenso revolucionario. En las siguientes líneas nos proponemos a explicar el proceso y proponemos una salida de independencia de clase para que sea tomada por las y los trabajadores.

¿De dónde venimos?

Bolivia entró en una situación de reflujo dentro de una etapa revolucionaria, caracterizada por el desvío de la revolución contra Áñez y el ascenso de Arce vía elecciones. Este reflujo marcó una situación favorable a la estabilización del orden burgués y la reconstrucción del Estado maltrecho, en detrimento de la movilización de masas.

En ese período, el MAS intentó reconstituir la institucionalidad burguesa herida por las luchas insurreccionales anteriores que produjeron la caída de Evo y la ingobernabilidad de Áñez.

Situación de Reflujo en pro de la tesis de Golpe:

Para esto, la burguesía, a través del MAS, atacó al proceso revolucionario con la campaña de que lo que sucedió en Bolivia no fue ningún ascenso de masas, sino un golpe de Estado. Negó el hecho de que Áñez podía caer por insurrección en la huelga general de la COB y que los trabajadores podían hacerse con el poder en ese momento, y negó que Evo fue tumbado antes que nada por una movilización insurreccional que quebró al Estado y su policía planteando el problema del poder para los trabajadores.

Con esta campaña de “golpe”, teniendo de chivo expiatorio el juicio a Áñez, atacó centralmente a toda movilización de clase trabajadora que cuestionaba al MAS, tildándola de golpista.

Así lo hizo con la lucha de salud, maestros urbanos, metalúrgicos de Vinto, mineros críticos de San Cristóbal, fabriles, cocaleros de los Yungas, entre otros.

Con esta línea desplegada a nivel político y jurídico, en sus primeros siete meses de gobierno, neutralizó las fisuras de su partido, hizo retroceder a los críticos internos de Evo como al diputado Rolando Cuéllar, que antes de esto exigía una nueva dirección para el MAS con fuerte presencia en el oriente. Al mismo tiempo, arrastró tras de sí a las rupturas anteriores, como Eva Copa, que con un discurso de oposición al MAS ganó la alcaldía de El Alto, pero meses después de las subnacionales volvió a trabajar hombro a hombro con el oficialismo.

Esta campaña de “golpe” no solo tuvo connotaciones nacionales, sino internacionales, donde la gran mayoría de la izquierda capituló a esa política burguesa de desvío de la revolución.

Avance Bonapartista

En este panorama de reflujo de la movilización y relativo triunfo de la campaña oficialista de golpe de Estado, el MAS se sintió fortalecido. La protesta de masas se dispersó y al estar sectorializadas, el MAS podía controlarlas con la burocracia sindical. De esta manera se sintió capaz de avanzar hacia un nuevo giro dictatorial con el fin de aplastar de una vez a los trabajadores.

Todo lo que el año 2018 no pudo hacer Evo con el nuevo Código Penal, persecutorio y represivo, que fue derrotado por la lucha de la alianza COB – ADEPCOCA – UMSA aquel año, lo hizo Arce con diferentes leyes de nombres eufemísticos. Desde la Ley de Emergencia Sanitaria que sanciona la protesta social, pasando por la Ley de Ganancias Ilícitas y financiamiento al terrorismo, que no es más que la persecución política a quien critique al gobierno a la par de estrangular económicamente con impuestos a la masa de desempleados convertidos en gremiales.

Pero, el ataque central para el salto bonapartista fue la toma física que perpetró el gobierno sobre el sindicato y mercado de ADEPCOCA. Política que aplicó con métodos policíacos, paramilitares y de terror, secuestrando dirigentes y amedrentando a sus familias. Esto buscaba la derrota física de un poderoso sector del campo, símbolo de la alianza obrera y campesina contra Goni el 2003, Mesa 2004, y Evo en 2018 – 2019. La alianza COB – ADEPCOCA y UMSA de 2018 fue el preludio de la caída de Evo Morales (alianza que en su dirección tuvo la participación de un partido trotskista, el MST boliviano).

Con el retorno del MAS al control del Estado, la reacción burguesa fue con todo su peso a derrotar al proletariado y sus aliados del campo. Los ministros de Gobierno y de Desarrollo Rural posesionaron sin siquiera guardar las formas al nuevo dirigente de ADEPCOCA, Arnold Alanes, títere del oficialismo, en un acto desarrollado en las instalaciones del mismo sindicato que en lugar de guardia sindical, estaba controlado por escuadrones policiales.

Esta intervención suponía el inicio de la derrota física de las masas y un golpe tremendo a la independencia política y sindical de los trabajadores en cada sindicato. En síntesis, implicaba un cambio de la situación de reflujo hacia una situación más reaccionaria o contrarrevolucionaria.

Victoria de las masas y cambio de la situación

Sin embargo, el ataque gubernamental que le dio por unos días el control del sindicato, provocó la respuesta revolucionaria de las masas que en una semana de lucha contra la intervención del MAS ganó la solidaridad de la clase trabajadora en las calles. El magisterio urbano así como los sindicatos de gremiales expresaron su apoyo abiertamente. Los sindicatos con dirigencia masista como la COB no brindaron apoyo oficial expreso, pero sí sus bases que viven en los barrios periféricos, al punto que los vecinos de Villa Fátima, Villa el Carmen y sus alrededores, lugar donde se ubica el sindicato intervenido, se movilizaron a favor de los cocaleros. Esto les costó que fueran atacados por la policía, pero lograron hacer retroceder a las fuerzas represivas y desenmascararon a los paramilitares infiltrados entre los cocaleros.

Finalmente, la base de ADEPCOCA organizada en asambleas democráticas llegó a concentrar decenas de miles de cocaleros aguerridos en La Paz. Con su comité de autodefensa a la cabeza rompieron el cerco policial. Los masistas usurpadores huyeron cobardemente de la sede. Las bases retomaron heroicamente el control del sindicato y el mercado que siempre les perteneció.

No fue una lucha meramente sectorial, sino que tuvo un cualitativo alcance nacional. La algarabía del triunfo no fue solo de los cocaleros, sino que fue compartida de manera espontánea por amplios sectores de trabajadores en cada departamento. Con esta victoria se marcó un hito en la situación de la lucha de clases boliviana. De la situación favorable a la ofensiva del MAS se pasó a una situación a favor de la movilización de masas, dejando atrás el reflujo para empezar a cruzar el puente hacia la situación revolucionaria.

Dentro de las lecciones más importantes de la lucha se encuentran a la asamblea democrática y el método de la movilización de masas para derrotar planes burgueses, la conformación de comités de autodefensa y la lucha central de ir contra la intervención del Estado burgués y su gobierno de turno en los fueros de la clase trabajadora.

Ascenso: segunda victoria de las masas

Inmediatamente después de esta victoria se produjo la lucha de gremiales, transportistas y mineros cooperativistas contra la Ley de Ganancias Ilícitas y Financiamiento al Terrorismo. Una ley que, como hemos dicho, no es más que la persecución política a quien critique al gobierno a la par de estrangular económicamente con impuestos a los trabajadores. Esta lucha también recibió la solidaridad de clase desde las bases.

La masiva movilización de gremiales y el anuncio de la entrada de transportistas y mineros a la misma bastó para que el gobierno retroceda y retire el proyecto de Ley del Senado.

A pesar de que los comités cívicos, CONADE y partidos burgueses de oposición quisieron apropiarse de la consigna de lucha en su disputa por el control del Estado con el MAS, no pudieron dañar la movilización que claramente se apartó de estos órganos de la burguesía.

El MAS junto a los cívicos intentaron desviar la atención de las movilizaciones discutiendo sobre el uso de la Wiphala como símbolo indígena nacional. El gobierno que ha absorbido todos los símbolos indígenas al servicio del Estado burgués, se valió de una provocación del comité cívico de Santa cruz que no permitió que la wiphala sea izada en el aniversario del departamento cruceño. Organizó así una marcha en desagravio a la Wiphala, que finalmente el MAS convirtió en una marcha de apoyo al gobierno contra la desestabilización “golpista”. Esto en el mismo marco de acusar a la masa movilizada de ser de derecha y golpista, cuestión que tras la victoria de ADEPCOCA quedó como un argumento absurdo.

Los cívicos que siempre le han hecho el juego al gobierno llamaron a un paro nacional intentando apropiarse de las consignas contra la ley en cuestión, desprestigiando la lucha, pero los trabajadores se movilizaron aparte, por lo que los cívicos fracasaron en su paro. El MAS intentó decir que la lucha contra la ley es de derecha y que esta fracasó.

Pero quienes en verdad han puesto en problemas al gobierno burgués de Arce no fueron los cívicos y partidos burgueses, sino los trabajadores por reivindicaciones propias de su clase, en contra de los planes proimperialistas y giros dictatoriales del MAS.

Por eso, la marcha de apoyo al gobierno organizada por el mismo Estado no pudo detener el ascenso de las luchas. El MAS se vio obligado a retirar el tratamiento de la Ley de ganancias ilícitas por presión de los sindicatos gremiales, transportistas y mineros cooperativistas.

La victoria de las masas debilitó aún más al gobierno y a las instituciones del Estado burgués con el desprestigio creciente de la policía y el poder judicial.

PREPARARSE PARA LAS LUCHAS VENIDERAS

El gobierno no se queda de manos cruzadas y toma acciones defensivas que pretenden reacomodar su fuerza. De esta manera ha permitido que el sector de Arnold Alanes abra un tercer mercado de la coca por lo bajo, lo que en un futuro piensa convertir en un sindicato paralelo que tumbe a ADEPCOCA, y aún mantiene a una treintena de dirigentes cocaleros de los yungas detenidos. Por ello, la lucha por la libertad de los presos continúa.

Al mismo tiempo, el MAS no anuló el proyecto de ley de ganancias ilícitas, simplemente la archivó a la espera de una mejor situación para volver arremeter y aprobarla. Además, tiene otras leyes ya en vigencia que permiten el estrangulamiento económico de trabajadores como la ley Nº1386.

En estos puntos, todos los sectores victoriosos han anunciado que se mantienen en Estado de emergencia y movilización constante.

ADEPCOCA marcó el camino para el ascenso y la lucha por recuperar la independencia de clase en todos los sindicatos y los gremiales han señalado el camino para derrotar las leyes del gobierno.

Es urgente profundizar estas luchas, más aún cuando el gobierno profundiza la dependencia del país al imperialismo y la explotación de los trabajadores con el incremento de la deuda con el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional que el MAS hará pagar a toda costa a la clase trabajadora.

Las direcciones del proletariado que están al lado del MAS son criminales, confundiendo a los trabajadores con el discurso de que movilizarse es de golpistas. O en otros casos, arguyendo que no hay condiciones para ganar luchas mayores. Lo cierto es que la situación ha cambiado, hay mejores condiciones para conseguir las reivindicaciones propias de clase trabajadora.

Las bases de la COB debemos recuperar este organismo de las garras de los dirigentes oportunistas que operan a favor del Gobierno burgués y partidos colaboracionistas, retomar el camino de la independencia de clase sacando a esa burocracia traidora y comenzar la unificación de las luchas.

Las conclusiones de las últimas movilizaciones victoriosas nos dicen que para ganar debemos marchar independientes del gobierno, los comités cívicos y de cualquier órgano pro burgués como la “oposición” parlamentaria y CONADE. No podemos retroceder en esos puntos para conseguir las reivindicaciones postergadas de salud, trabajo, educación y forjar la alternativa política de trabajadores.

¡CONGRESO DE LA COB! ¡YA! PREPARAR EL PLAN DE LUCHA Y UNA NUEVA DIRECCIÓN CLASISTA Y DE COMBATE.

Octubre de 2021

image_pdf
Siguiente publicación

Quelali organiza un nuevo fraude para asaltar la FUL UMSA 2021-2024

¡NO AL FRAUDE DEL MAS EN LA FUL! POR ELECCIONES DEMOCRÁTICAS, CON UN COMITÉ ELECTORAL IDÓNEO DESIGNADO POR LAS BASES Y NO POR LOS DIRIGENTES CORRUPTOS Después de tres años del escandaloso fraude de la FUL UMSA 2018, la directiva ilegítima de Álvaro Quelali vuelve a arremeter contra el estudiantado […]
Foto: JS